EL SUEÑO DEL PIBE
Nora le pregunta a su hijo de tan solo 4 años, Jamal, -Que quieres ser de grande?- él la miró y le respondió sin mucho que pensar-Jugador, jugador de fútbol- la madre algo impresionada, ya que era algo que no se le cumplía a todos los niños, le dijo que nunca pierda sus esperanzas y que creyera en su sueño.
Para su cumpleaños Nora decide regalarle una pelota de fútbol, y de esa forma de a poco Jamal se fue metiendo en el ambiente del fútbol. Comenzó a jugar en un típico club de barrio de la ciudad donde vivía y enseguida los caza-talentos notaron sus condiciones y pusieron sus ojos en él como una gran promesa que podría explotar en cualquier momento. El tiempo pasaba, Jamal ya tenia 12 años y sus condiciones ya eran claramente visibles a la hora de jugar, nadie era capaz de sacarle el balón, tenia una velocidad y una habilidad que realmente lo destacaba de los otros chicos de su edad. Era un partido clave, los caza-talentos estaban ahí preparados para observar el partido y así ya empezar a reclutarlos para meterlos en algún equipo profesional y a la vez representarlos. El técnico Pepe, antes de que su equipo saliera a la cancha, habló con Jamal,- Sé lo que hay en tu cabeza, sé lo que estas viviendo, sé lo que se siente, yo era igual que vos a tu edad, fui una gran promesa, me deje llevar por esas personas que te van a estar observando ahí afuera y así quedé, sin nada, y con mi sueño arruinado, no vas a lograrlo solo, es muy difícil, pero pase lo que pase hoy cuídate.- Jamal luego de todo ese discurso lo miró asombrado y asintió con la cabeza y salió al campo de juego.
Si alguien dice que no lograrás algo, no te desilusiones, eso tiene que ser usado como motor para demostrarle al mundo lo contrario, que si se puede, que los sueños se cumplen si luchas lo suficiente, si nunca te rindes.
Que alguien haya fracasado no significa que tu también fracasarás, tienes que ser lo suficientemente sabio de intentar y arriesgar, luchar por tus sueños, por lo que queréis, de eso se trata la vida.
Finalmente el partido se jugó, y Jamal se lució siendo él la propia figura del encuentro. Los caza-talentos lo vinieron a buscar llevándoselo a uno de los equipos profesionales más importante del país.
Comenzó a jugar en las formativas de ese club y cada año que pasaba era mejor que el anterior, los trabajos daban sus frutos y la promesa que era de chico lo impulsó a cada vez estar más cerca de lograr su sueño.
Estaba a un partido de cumplir su sueño, luego de ese partido Jamal iba a ser ascendido a la 1era división, por fín iba a cumplir el sueño que tenia desde pequeño, pero no todo iba a salir como quería. En el equipo contrario se encontraba jugando Rómulo, un joven como él, pero sin sus características futbolisticas, Rómulo tenia tanta rabia, tanta envidia que estaba dispuesto a arruinar su carrera antes de que llegara a explotar en primera división. Y así fue... apenas comenzado el partido, Jamal tenia el balón en sus pies y enseguida apareció corriendo desenfrenadamente hacia el Rómulo, quien se le tiró una barrida violentamente a los pies de Jamal. Éste, comenzó a volar por el aire al recibir el impacto tan brutal de la patada, en ese momento la tribuna quedó muda, no se sentía ni un ruido, y PUM! cae al césped con un golpe seco sin moverse Jamal, tenía mucho dolor y no sentía las piernas, con lagrimas en los ojos notó que había sangre. Desafortunadamente Jamal sufrió una fractura expuesta de tibia y peroné, pero no solo eso, a la vez, fue tanto el desplazamiento que tuvieron los huesos que le provocó también el corte de los cartílagos de crecimiento. En fin, una lesión feisima que lo alejaría un largo tiempo de las canchas o sino definitivamente para siempre... Rómulo fue pensado y como sanción fue sancionado de por vida teniendo la entrada prohibida a cualquier escenario futbolístico.
En el hospital mientras tanto, Jamal fue operado de urgencia, y luego de la operación el doctor habló con Jamal y su madre. Les dijo: - Te espera una larga recuperación de más de un año, lo lamento por por ti Jamal porque escuché hablar de las condiciones que tenes como jugador pero por el grado de la lesión no vas a poder volver jugar nunca más al fútbol, lo siento.- Esas palabras, lo lastimaron más que la propia patada que le provocó la lesión, veía como su sueño, el cual estaba a punto de hacerlo realidad ahora se destruía. Salió del hospital a la semana y volvió a su hogar para hacer el reposo correspondiente que tenia que hacer por un par de meses...con el tiempo la gente lo fue olvidando, y aún así el sacó fuerzas hasta de donde no podía y prometió que un día volvería a jugar al fútbol y que iba a cumplir su sueño.
La vida es así, a veces nos golpea y duro, nos tira, pero siempre tenemos dos opciones, quedarse ahí, en ese dolor, en esa realidad o levantarse e intentar cambiar. Los golpes nos muestran la relidad, lo dura que puede llegar a ser la vida, pero aprendemos de esas cosas, nada puede ser en vano, si sale bien es un logro, una motivación para seguir, y si sale mal es experiencia.
De a poco, sin apuros se fue aprontando para su regreso, si él quería volver a jugar sabía que dependía de él mismo y debería ser lo suficientemente valiente para arriesgarse, al fin y al cabo hay que dar todo por cumplir su sueño. Y así pasó, luego de 2 años de recuperación y tratamientos más fisioterapia volvió a probar suerte en el fútbol, rápidamente lo ficharon en un cuadro que no era tan famoso pero donde comenzó a brillar con rapidez. Cumplió su sueño, llegó a jugar en 1era división como quería desde pequeño pero no todo terminó allí... Con tan solo 21 años, luego de la fractura sufrida a los 18, emigró a Europa donde también en un abrir y cerrar de ojos se convirtió en famoso, llegó a jugar en la selección defendiendo a su país, y tuvo una carrera futbolistica muy variada y gloriosa, conquistando diferentes títulos personales como también con los equipos que defendía, su carrera fue un sueño cumplido, y una muestra para las generaciones que estaban por venir de que nunca pero nunca hay que darse por vencido, que la vida te da revancha y te sorprende, y que al final cualquier sueño puede ser realidad si se cree lo suficiente.
Fin
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