viernes, 5 de julio de 2013

Diabólica Metamorfosis

"Sé que no será fácil, pero quiero intentarlo. " El diaro de Noa

De eso se trata la vida, de intentar...arriesgarse a probar e intentar cosas nuevas. Sin intentar uno nunca va a saber lo que pueda pasar, lo que puede cambiar, etc. En la vida hay que tomar riesgos, arriesgarse y jugársela por completo en cada decisión, porque la vida es una y quizás no haya próxima vez, segunda oportunidad, es ahora o nunca. 
Todo comenzó en el infierno, Balan había crecido, era un príncipe demoníaco, valiente y aventurero, pero toda su vida, su corta vida sentía que no pertenecía a ese lugar. Desde que era pequeño hasta ese momento de su vida, Balan, había soñado con ser un ángel, vivir en el paraíso, feliz, sin preocupaciones prácticamente y no tener que estar condenado a una tristeza o a un castigo como lo era el infierno. Los demonios ancianos, siempre le contaban una leyenda a los demonios pequeños, era sobre una niña demonio llamada Arusa, que había podido escapar con vida del infierno y que luego de eso no se supo nunca más nada de ella. Esa leyenda le había quedado grabada a fuego y por esa misma razón él quería intentar escapar hacia otro mundo mejor. 
Al cumplir la mayoría de edad, ya era hora de enfrentar su destino, si el quería huir debía luchar y vencer a Lucifer, el Rey y dominador de todo el infierno. No era nada fácil vencerlo, pero si el quería escapar no tenia otra alternativa. Se había preparado más de un mes para el día de la batalla, se entrenó en un campo algo alejado de los conflictos que surgían diariamente allí, y finalmente llegó el día... Lucharon todo un día entero, Balan tuvo que pasar varios obstáculos antes de llegar al gran final donde se enfrentaría al peor demonio de todos los tiempos, nada más ni nada menos que al temible Lucifer. La batalla casi le cuesta la vida, pero sacó su máxima fuerza interior, confió en si mismo y finalmente pudo derrotar a su temible adversario. 
Escapó tal cual lo había hecho la chica de la leyenda, fue hacia la superficie de la tierra humana y desde allí, mágicamente tomó altura hacia el cielo. Al llegar a las puertas del cielo, lo esperaban los ángeles guardianes del paraíso, le impidieron pasar primeramente porque era un demonio y así no podía pasar, tenia que ser un ángel como ellos, y para ello, debía cumplir con una misión... Su misión era que tenia que demostrar que era capaz de sentir amor, de enamorarse, que era capaz de tener sentimientos, dado que venia del otro mundo donde todo era oscuridad y maldad eso era una misión muy difícil. 
Balan estaba a punto ya de descender a la tierra, donde buscaría al amor de su vida, la mujer que lo enamoré y le permita poder ser un ángel tal como lo había soñado toda su vida. Los ángeles guardianes lo transformaron totalmente en un ser humano, le dieron toda la apariencia que necesitaba, ahora solo dependía de él mismo generar los sentimientos. 
Así fue como descendió al mundo de los mortales, empezó a convivir con ellos, a hacer sus primeros contactos, creyó que iba a ser fácil encontrar el amor pero se equivocó... pasaron días, pasaron meses, incluso hasta años y Balan seguía completamente solo, no fue capaz de hacer amistades, los chicos que se le acercaban él los alejaba, solamente se concentraba en las chicas para así tratar de conseguir enamorarlas y a la vez enamorarse. El sentimiento de tristeza y desilusión por no lograr lo que quería comienza a rodearlo, empieza a pensar en rendirse y regresar vencido al mundo donde realmente se dio cuenta que pertenecía, al infierno. Ya cansado decide abandonar todo, pero justo en ese preciso momento, ella apareció, ella era la chica más linda y sencilla que vió hasta ese momento en la tierra, tenia una sonrisa que enamoraba, una voz dulce, y una personalidad encantadora. 
-Soy Arusa, tu como te llamas?- preguntó la chica, Balan medio entrecortado y asombrado por el nombre de la chica respondió: - Soy Balan, de donde vienes?-, continuó preguntando el. La respuesta tardó en llegar porque se quedaron perdidos en la mirada, luego de unos segundos ella contestó -Tu sabes bien quien soy y de donde vengo-, Balan se sorprendió y para confirmar lo que pensaba decidió preguntarle: -¿Sos la chica de la leyenda? ¿Tu escapaste del infierno? ¿Fuiste la primera en hacerlo?, ¿eres tu?-, la chica cierra los ojos lentamente, y al abrirlos, sus ojos eran rojos como el fuego más ardiente, y contestó: - Muy bien, sabes quien soy y yo sé perfectamente quien eres tu, tu luchaste con Lucifer porque tienes el sueño de estar arriba, en el paraíso donde ambos pensamos que pertenecíamos, yo escapé por la misma razón que vos y tengo tu misma misión, pero estamos condenados a vagar en este mundo, porque somos demonios y nunca podremos sentir algo, jamás tendremos sentimientos, solo mírame... Hace más de 30 años que convivo con esta soledad aquí, sin envejecer, sin sentir, sin confiar, somos seres duros incapaces de generar sentimiento, nunca cumpliremos la misión... -Cállate y bésame lentamente-, interrumpió Balan, a todo el discurso que estaba diciendo Arusa, la agarró firmemente de las mejillas y lentamente fue acercándose hacia su rostro y sin apuros besa su frente, y vuelven a mirarse fijamente a los ojos y a continuación... se comienzan a rosar sus labios, empiezan a besarse, sienten que vuelan, se sienten flotar en el aire y el corazón comienza a acelerarse, tanto que les explota y una brillante luz amarilla se desprende de ellos como si fuese un rayo de sol. Comienza su metamorfosis, poco a poco van sintiendo el cambió, sienten como todo es paz y tranquilidad a su alrededor, sienten como les crecen las alas en la espalda, sienten como vuelan hacia el cielo. Lograron su misión. 
Enamorados los dos luego de ese beso tan pasional que los llevó a cumplir la misión los ángeles guardianes 
 los vuelven a recibir en las puertas del paraíso, pero esta vez en cambio, les abren las puertas y les permiten entrar a la paz eterna, el universo que siempre soñaron lo estaban disfrutando, cumplieron su sueño y todo por intentar, pero no todo termina allí... A los días los ángeles guardianes los mandan llamar, Dios quería conocerlos, fueron a su altar sagrado y arrodillados ante él, se conocen, tienen una pequeña charla y luego Dios les da una nueva misión, ambos serían a partir de ahora Cupidos y deberían volar sin ser vistos por la tierra buscando enamorar y unir parejas, todo eso a cambio de su permanencia en el paraíso. Ambos aceptaron sin pensarlo, pensaron que sería tarea fácil pero su pasado de demonios les jugo en contra porque al momento de flechar, no consideraban la persona correcta tiraban flechas sin pensar y así fue como de a poco, los humanos se empezaron a quejar del amor y cada vez a creer menos en el, pero finalmente pudieron solucionarlo, enamoraron a una buena pareja y a partir de allí, el amor en la tierra quedo bienvenido, y tanto ellos siendo ángeles y los nuevos cupidos, como los humanos, vivieron felices por siempre. 

FIN!

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